La leyenda cuenta que, existe una enfermera con vestimenta de colo blanco que ronda por los pabellones del hospital General. Aquella, se acerca muy amablemente a las camas donde están los pacientes que van a morir prontamente. Se dice que ella personifica a la muerte, pues cuando pasa su mano por la cabeza del enfermo, éste fallece inmediatamente.
Se dice que es un alma buena, pues ayuda a los pacientes que adolecen mucho, para que tengan una muerte sin sufrimiento. Los conocedores de esta leyenda, cuentan que esta enfermera era una mujer muy trabajadora y que le gustaba ayudar a los enfermos, pero tenía un jefe que la maltrataba mucho, hasta que un día ella se cansó y se envenenó. Desde ese momento, no puede descansar en paz y tiene que vagar por el hospital ayudando a las personas a tener un final sin sufrimiento, para que de esta manera, Dios la perdone y la acepte en el paraíso.